Carta de amor

Hoy me gustaría compartir algo muy especial con vosotros. Como muchos sabréis, me apasiona escribir y además de la novela que tengo entre manos y que se ha retrasado su lanzamiento indefinidamente porque no me da la vida para más XD, tengo otras cositas escritas que están cogiendo polvo en algún rincón de mi ordenador. Por esa misma razón, me gustaría compartir con vosotros algunos de estos pequeños escritos con el fin de que los leáis y en la medida de lo posible disfrutéis (ya si me comentáis tanto las opiniones positivas como las negativas sería la panacea). 
Este texto que os traigo lo presenté a un concurso nacional el año pasado. La temática del mismo era sobre cartas de amor y desamor y en mi caso me decanté por una mezcla extraña de los dos. Antes de nada, decir que el contenido es puramente ficticio y sin detalles autobiográficos. ¡Escribí lo que se me pasó por la imaginación! Espero que os guste. 

A ti: 
Si estás leyendo estas líneas, significará que por fin he escuchado a mi corazón y he decidido abandonarte. Sé que piensas que despedirse por carta es de cobardes, pero he considerado que debía rebajarme a tu mismo nivel, porque si hay alguien aquí que sea un cobarde, ese eres tú, amor mío. Y sí, digo amor mío porque te sigo queriendo. Debes pensar que soy una estúpida o puede incluso que te regocijes al saber cómo me siento, pero tanto me has cambiado, tanto me has alejado de lo que era antes de conocerte, que ya no tengo amor propio, ni siquiera para dejar de quererte después de todo el daño que me has hecho. El daño que nos hemos hecho mutuamente. Porque no lo niegues, tú tampoco eres feliz a mi lado. Nunca lo has sido.  Es posible que me quieras, no lo voy a poner en duda, aunque tengas una forma un tanto peculiar de demostrarlo, pero eso no es sinónimo de que seas feliz. Simplemente te conformaste conmigo, como yo me conformé contigo. Pero, ¿sabes cuál es la diferencia que existe entre tú y yo? Sí, puede que me conformara con estar a tu lado, pero puse todo mi empeño, mi cuerpo y mi alma por cambiar ese sentimiento. Y durante un tiempo lo conseguí. Fuiste el pilar en el que me apoyaba cuando tenía miedo de caer. Fuiste el aire que respiraba cada mañana cuando me despertaba. Fuiste mi modelo. Fuiste mi amado. Mi príncipe. Mi salvador, mi héroe y todo mientras me castigabas con tu silencio, con miradas inundadas en esa mezcla de amargura y reproche. Todo mientras en tu cabeza se iba forjando esa pregunta que te ha estado torturando durante todos estos años. ¿Qué hace un tipo yo con una mujer como esta? 
Es hora de terminar con nuestro mutuo sufrimiento. Es hora de que alguien de un paso al frente y se plante. Y me ha tocado a mí. No podemos seguir compartiendo una vida juntos si ya ni siquiera nos miramos a la cara. La vida es demasiado maravillosa como para que la pasémonos odiándonos y lamentándonos por algo que tiene solución. Y esa solución radica en tomar caminos diferentes. 
Me merezco saborear un poquito de la felicidad que no llegué a alcanzar contigo. Y tú también. Me marcho lejos de ti y de la vida que construimos juntos, pero quiero que sepas, que pese a todo y aunque me duela, has sido uno de los hombres más importantes de mi vida. 
Espero que encuentres con otra lo que nunca hallaste conmigo. 

Siempre tuya

Lucía

 © Lara Alonso

Comentarios